Proyecto Sur y la reconstrucción del sistema ferroviario

Un grito en el BAUEN
De la Redacción de InfoSUR
Como sostenemos en cada editorial, Proyecto Sur se propone la reconstrucción del país, sobre los ejes irrenunciables de la recuperación de los recursos naturales, la lucha para acabar con la miseria y la desocupación, y el impulso de la integración latinoamericana. En los últimos días, hemos decidido dar un paso adelante con otro de los temas de crucial importancia para un país de más de 4.000 kilómetros de extensión: la reconstrucción del sistema ferroviario, frente a la crisis general del transporte argentino y los contratos del “tren bala”.
En este sentido, hemos podido dar un importante sacudón al espurio sistema mediático-político argentino, al realizar, el pasado miércoles 20 de febrero, un gran acto en el Hotel Bauen, bajo el lema “¡No al ‘tren bala’, Sí al tren para todos!”. Nuestras previsiones se vieron gratamente desbordadas. La sala que había sido reservada resultó chica; no quedándonos otra opción, más que continuar el acto sobre la Avenida Callao. Este gran esfuerzo realizado, más varias apariciones en los medios de comunicación y la movilización de todos los integrantes del movimiento, nos brindaron, nuevamente, la oportunidad de acercarnos a una gran cantidad de argentinos, para conversar y explicar nuestra posición ante los anuncios del “tren bala”. Ganar la calle con temas poco abordados por los medios masivos de comunicación nos permite posicionarnos con propuestas novedosas y de gran interés para nuestro pueblo.
Pero todo esfuerzo será vano si no logramos la Unidad. Proyecto Sur llama a revertir el proceso de fragmentación política vivido en los últimos años. Será necesario construir un sólido movimiento político para enfrentar lo que han develado las últimas novedades del mundillo político tradicional: el pacto pejotista. El acuerdo al que llegaron el ex presidente Néstor Kirchner y el ex ministro oficialista y ex candidato presidencial opositor Roberto Lavagna, ha logrado los apoyos de prácticamente la totalidad del aparato justicialista, el mismo que ejecutó, en los últimos 25 años, las más amargas traiciones al pueblo argentino.
Inmediatamente, las alas “progresistas” y sociales del kirchnerismo comenzaron a delinear una confederación de espacios extra-PJ, con el fin de constituir un núcleo de “apoyo crítico y con autonomía” (sic). Será un espacio de apoyo a los Kirchner, por fuera del tradicional PJ, lo que ellos mismos consideran una foto del pasado. Pero no advierten que las aguas políticas no se dividen allí; sino, en el enfrentamiento o aceptación de los pilares todavía presentes del modelo neoliberal: la entrega y depredación de los recursos naturales, la concentración de la riqueza, la extranjerización de la industria y la tierra, entre tantos otros.
Mientras la gran central de negocios que es el PJ se reorganiza, en el mediático espacio opositor no se pone en discusión ninguna de estas cuestiones estratégicas. Es entonces aquí donde se alzan, con mayor fuerza, las voces de Proyecto Sur. Sin prisa, pero sin demora, lograremos organizarnos en torno a estas grietas nacionales. Difundir estas voces, que llevan críticas y propuestas, es la necesidad del ahora.