jueves, 25 de febrero de 2010

Excelente Jornada sobre Imperialismo Ecológico

















Un tema apasionante. En estos días, Andalgalá, petróleo en Malvinas. Historias del robo imperial, de mil rostros.
Comisión de Ambiente y Bienes Naturales de Proyecto Sur, junto a Recuperar lo Nuestro, los Jóvenes pudieron organizar una Jornada con el Geógrafo Pablo Sigismondi que contó también con la presencia del Henry, el ahitiano que nos pudo contar la historia actual del sufrimiento de su pueblo.

Un auditorio, en Luz y Fuerza, pleno, de militantes y de pasiones por al vida

MOSTRAMOS CAPACIDAD DE ORGANIZACIÓN, DE CONVOCATORIA, Y ETICA MILITANTE, SIN QUE NADIE QUIERA LUCIRSE o POSICIONARSE POR ENCIMA DE NADIE O QUEDARSE CON LOS "laureles" DE LA ACTIVIDAD.

jueves, 18 de febrero de 2010

BICENTENARIO DE LOS PUEBLOS LATINOAMERICANOS

¿QUE CELEBRAMOS? ¿PARA QUE?

Por un Bicentenario mestizo, popular y emancipatorio


Señor, señora, vecino, vecina:

Queremos invitarlos a pensar la historia como presente y no solo como un pasado. ¿De qué se habla cuando dicen “bicentenario”? ¿Bicentenario…de qué? ¿De la independencia? ¿De las guerras libertadoras? ¿De qué o quiénes nos independizamos o nos liberamos? ¿Quiénes conquistaron esas libertades? Acaso solo San Martín, Belgrano y unos cuantos próceres más o el conjunto del pueblo?

Buscar la respuesta a estas preguntas nos lleva a pensar seriamente en nuestras actuales opresiones y en la necesidad de continuar un camino
de liberación.


No hemos resuelto todavía los graves problemas sociales: marginalidad, emprobrecidos, desempleo, destrucción del medio ambiente, inseguridad social. ¿Cómo explicar que en un País que puede producir alimentos para dar de comer a 300 millones de personas tengamos que renegar con una inflación que no perdona y con la dramática situación de niños y adolescentes mal y desnutridos?

No estaría mal que aprovechemos la celebración para retomar los sueños de nuestros antepasados, sueños de libertad, dignidad, soberanía.
Libertad, independencia, significa que la historia puede recomenzar cada día con voluntad propia y colectiva. Un camino que empezó hace tiempo, antes de que llegáramos cada uno de nosotros. Esa historia hay que asumirla, hay que seguir haciendo la independencia.

Hoy podemos verificar nuevas opresiones, nuevas esclavitudes y por lo tanto, nuevos opresores. Hay que descubrir quiénes están a favor de nuestras libertades o quienes están a favor de los que dominan. Miremos nuestros pueblos originarios, nuestros abuelos inmigrantes, criollos, aprendamos de su sabiduría, de su capacidad de lucha, de trabajo, de resistencia. Buscaban la felicidad y la prosperidad sin los criterios capitalistas de “éxito” económico, de “eficacia” o de “competencia”.

Para eso queremos vivir en una Nación: para que nuestros hijos encuentren aquí el lugar donde vivir y realizarse dignamente.

¿Qué o quiénes se oponen a este simple proyecto de libertad? ¿Los políticos, los curas, los medios, los banqueros, los ricos, los norteamericanos... o acaso nosotros mismos?
Hay que reconocer que, además de las traiciones y la corrupción de nuestra “clase dirigente” vivimos en un sistema ordenador, en una sociedad capitalista que nos impulsa a consumir lo que no necesitamos. La propaganda, las medios de comunicación social, instalan, crean en nosotros, necesidades que no son reales pero que nos hacen salir corriendo a comprar, incluso a gastar lo que no tenemos. A trabajar para consumir y a pisarnos entre nosotros para salir a flote, corrompiendo nuestros lazos solidarios. ¿Acaso no vemos casi a diario una “guerra de pobres contra pobres, de trabajadores contra trabajadores? ¿Acaso no terminamos incluso por culpabilizar de todo lo que nos pasa a los morochos, los bolitas, perucas o villeros, como si fueran la causa de todos nuestros males?

Esto no nos pasa a nosotros solos. Todos los pueblos de Latinoamérica fuimos invadidos y dominados por el imperio español en su momento y seguimos hoy invadidos y dominados por imperios financieros, menos visibles y más sutiles pero igualmente perversos. Las gestas de independencia y liberación deben continuar hoy, recuperando nuestras raíces culturales, haciendo memoria de nuestras riquezas materiales y valores culturales…nuestra bebida nacional no es la cola, es el mate, nuestras comida nacional no es la hamburguesa, es el asado, no comemos cookies, nos gusta el pan con chicharrón.

Lo convocamos a sumarse en este camino y este proyecto emancipatorio, de colores, aromas, comidas, bailes, ritmos, valores afectivos e íntimas creencias de nuestros pueblos.

No dejemos que el “bicentenario” sea una celebración superficial, sin
memoria, sin proyecto.

El Mayo de 1810 es hoy, es mañana. Es nuestro, de todos y todas.

MOVIMIENTO RECUPERAR LO NUESTRO (MRLN) en PROYECTO SUR CORDOBA

Icho Cruz, Febrero 2010

martes, 16 de febrero de 2010

Editorial Horizonte Sur, Ahora a la Intemperie

miércoles 10 de febrero de 2010

EDITORIAL DE HORIZONTE SUR, AHORA A LA INTEMPERIE, DEBIDO A LA DISCRECIONALIDAD DE LOS NUEVOS CENSORES EN LA RADIO PÚBLICA
UN VERANO QUE, SEGURAMENTE, HABRÁ DE SER DIFÍCIL DE OLVIDAR…

Este verano probablemente será inolvidable para muchos, y no solamente por las altas temperaturas, que convirtieron a las ciudades argentinas, como consecuencia de la falta de espacios verdes, de planes de arbolado urbano y en especial por la demencial acumulación de torres de cemento y de calles asfaltadas, en verdaderos hornos, donde la vida se hace sumamente hostil. También se hará inolvidable este verano por causa de las luchas intestinas del poder político, confrontaciones, renuncias de altos funcionarios, conspiraciones supuestas y amenazas que acentúan un clima inhóspito y sin sosiego para el común de los argentinos. En verdad, resulta cada vez más difícil sustraerse a las rencillas en el más alto nivel político, sino por la indiferencia y por una creciente desconexión. En el episodio Redrado que vivimos en estos comienzos del año se repite, lo ocurrido durante la propuesta de la 125 y la llamada crisis del campo. De nuevo el país se divide a partir de los conflictos internos del gobierno, de nuevo resultan incomprensibles al común las razones profundas del problema y otra vez, las lógicas de la confrontación se imponen, por sobre todo otro pensamiento y en especial, por sobre toda estrategia que asegure un destino común. Como si estuviésemos en una puesta en escena reiterada, el coro de intelectuales asalariados aporta rápidamente sus elaborados discursos para probar la existencia de operaciones destituyentes, y los inculpados, en vez de hacer lo necesario para demostrar la inconsistencia de las acusaciones, hacen lo posible para ser funcionales a una lógica binaria que pareciera concertada por ambos contendientes en algún nivel esotérico del drama político argentino. La situación adquiere ribetes de verdadero escándalo e irrealidad, cuando después que la propia Presidente, absolutamente ignorante de la lucha llevada durante años por Alejandro Olmos, afirma con suficiencia, que la Deuda Externa devino legítima, simplemente porque el primer gobierno democrático no fue capaz de denunciarla, la audiencia de leales y sofistas que la escucha, vocea tramposamente: ¡Patria sí, Colonia no! Mientras tanto y porque en este baile de máscaras en que se ha convertido la política nativa, cada uno hace su juego, el ex Presidente Duhalde, que busca su lugar a cualquier precio bajo el sol de los medios, aporta lo suyo reclamando el dislate de la reconciliación con los militares y afirmando que la continuación de los juicios humilla a las Fuerzas Armadas... Rápidamente los progresistas defensores de los derechos humanos del pasado, se desgarran las vestiduras ante semejante sacrílega propuesta, y de esa manera el circo está completo, y requiere un gran esfuerzo sustraerse a la tentación de no tomar partido por unos o por otros…

Nos preguntamos, ¿qué ocultan y qué exhiben estos escenarios concertados y repetidos de confrontación? En primer lugar, exponen una clara y común extracción social de los participantes en el juego, ellos constituyen una minoría de privilegiados que se reciclan y reproducen como una metástasis sobre la carne adolorida del país, aprovechando una dictadura de iguales basada en el simulacro y en los discursos tramposos. Progresistas y neoliberales, son dos caras de un Jano que tiene los mismos propósitos: los de perpetuarse en el Poder de una Argentina derrotada por las estrategias y acciones que ellos mismos implementaron en los años pasados. Una Democracia de baja intensidad al estilo de la política partidaria en la Argentina, tal como la que nos han impuesto, implica una formidable exclusión social de los sectores castigados por el modelo, y una enorme complicidad de todos los que participan, en ocultar las causas de la pobreza y en disputar tan solo sobre los posibles modos de remediarla... Es decir, en cómo poder participar en la industria de la asistencia social que ha generado la pobreza… En esto no existe inocencia por parte de quienes pugnan por espacios de poder y tanto los grupos de izquierda como los dirigentes sindicales, son absolutamente cómplices de un sistema basado en el más puro asistencialismo.

Preguntémonos: de qué no se habla en la Argentina, y tendremos la respuesta a tanta angustia y la salida a tanta pasión desmedida instalada en lo meramente coyuntural y episódico. No se habla tal como ya dijimos, de cómo resolver el tema de la pobreza sino por métodos asistenciales y por un creciente control social que impida nuevos estallidos. En eso existe una generalizada red de complicidades. De hecho todas las estrategias del PJ están claramente diseñadas para evitar el desborde y anticiparse con asistencialismo a los conflictos eventuales. En las reuniones partidarias los barones del conurbano, ni siquiera tienen empacho en confesar que en eso han convertido al Movimiento Peronista: en un instrumento de control social. Tampoco se habla del modelo de dependencia que ha generado esa pobreza y en todo caso se discute el cómo y el cuánto de la participación en las rentas, que ese modelo proporciona a los administradores. Más concretamente, no se habla de la sojización y de los agronegocios, a los que se ha naturalizado como destino argentino. Menos aún, se habla del modelo agro exportador que se impuso una vez más, en el 83 con la Democracia, como consecuencia de la necesidad de procurar divisas para pagar los intereses de la deuda, así como de la necesidad europea primero, y luego de China, de tener crecientes cantidades de forrajes para producir carnes en encierro. Una cerrada concepción urbana de la vida, se niega de manera porfiada a considerar que la Argentina continúe sometida a un modelo de dependencia neocolonial de exportación de comodities y de bienes naturales. Esa mirada se obstina, asimismo, en ignorar los daños extendidos que el proceso de sojización ha producido en los ecosistemas. Y cuando la devastación de los paisajes y la emigración masiva de las poblaciones rurales a los conurbanos de pobreza, resultan datos relevantes de la Argentina actual, para cualquier observador extranjero, miles de intelectuales supuestamente preocupados por lo nacional, son absolutamente indiferentes a esas situaciones y por lo contrario, han devenido empecinados detractores de quienes las develamos.

Han convertido al mundo en el patio de los objetos, patio en que las antiguas sacralidades hoy se reemplazan por el departamento, el lavarropas, el vehículo propio, las bolsas con dinero en el baño de algún ministro, las armas de la policía eléctricas o de las otras, o acaso el tráfico especulativo en dólares desde altas funciones de gobierno. Han transformado a los objetos en sus nuevos dioses y ello ha conducido a estos sectores medios y a quienes los expresan políticamente, a devenir en una caricatura del hombre blanco de los siglos anteriores. Son de esa manera, furiosamente modernizantes, partidarios de las tecnologías de punta, creyentes confesos en todo crecimiento y amantes de la idea de progreso sin atenuantes. En ese modo obstinado de dar la espalda a todo lo rural, todo aquello que tenga que ver con la naturaleza o con la vida, incomoda y debe ser rechazado o desnaturalizado. La soja a la que por años han respaldado como monocultivo excluyente e ignorado como causa de la dependencia nacional, pasa de pronto en los discursos a ser el yuyito del que se ríen con nerviosismo, como si no supieran de qué se trata… la carne porcina, que es el eslabón siguiente en las nuevas cadenas agro alimentarias de producciones globales de carnes en encierro con balanceados transgénicos y de la cual no han hecho sino elevar el piso de madres hasta desplazar a todo pequeño y mediano productor, para dejarle el mercado a las corporaciones, pasa a convertirse en palabras de nuestra presidente, en algo mejor que el Viagra, por sus supuestos efectos estimulantes. Pareciera que referirse a la Naturaleza o a la comida, los coarta y hasta perturba, de tal modo que tienen que apelar al humor o a las parodias, para referirse a ello. Tal vez les ocurra lo mismo con todo aquello que tiene que ver con lo primordial de lo humano. Cualquier propuesta de simplificar la vida actual o hacer más racional el consumo de energías será vista por ellos como volver a las cavernas… Es evidente que subyacen en esa expresión disparatada, terrores profundos no elaborados que son incapaces de enfrentar. Cuando la Presidente habla de los fedlots o corrales de engorde, esos infiernos dantescos donde se hacinan decenas de miles de bovinos alimentados con balanceados del modo más antinatural, refiere a una ganadería con tecnologías incorporadas…¿? Como si el hecho de consumir la cama de pollos y otras basuras además de vivir en chiqueros hediondos y patogénicos, pudiera añadirle a la carne alguna ventaja que no tuviera la que antes disponía nuestro país, considerada la mejor carne del mundo, producida por animales que caminaban y pastaban libremente en grandes extensiones. Alguna vez escuché algo parecido por parte de la actual funcionaria Adriana Puigrós. Siendo Secretaría del área científica del Gobierno de Menem, en una reunión de las Naciones Unidas para la cultura refirió a las semillas genéticamente modificadas como “semillas con tecnologías incorporadas”, como si no se atreviera a pronunciar la palabra transgénicos ni a enfrentar el misterio profundo de la seminalidad… Supongo que perfectamente, esta clase intelectual, podría asimismo, definir a la cesárea como un parto con tecnología incorporada…Y continuando este razonamiento que nos conduce directamente a la irracionalidad, tendríamos que, un bebé de receta, en que se realiza una selección genética del óvulo, sería para el común de estos progresistas, un humano con tecnología incorporada… El drama de estos sectores medios es existencial, abandonaron o rechazaron a los antiguos dioses tutelares de la América profunda, para rendir idolatría a las tecnologías de punta, las góndolas y las fechas de vencimiento. Ellos expresan los extravíos de un sector social que alguna vez llegó a confundir la lucha armada con la revolución y que en los últimos tiempos ha confesado por boca de Horacio Verbitsky que, en la búsqueda de articular frentes populares para el crecimiento, cometió el burdo error de confundir a las empresas transnacionalizadas con la burguesía nacional. En un periplo que va de Marx y Lenín a Marta Hannecker, han perdido de manera creciente el sentido común y se hunden sin remedio en el mayor de los ridículos.

Lamentablemente, no todo es circo, tembladeral y simulacro. Por debajo de las penosas operatorias políticas y de las más penosas todavía, distracciones colectivas, continúan operando las Corporaciones transnacionales y continúa profundizándose el destino impuesto a nuestros países, de ser los enclaves de producciones necesarias a las grandes metrópolis. En los primeros días del mes de Febrero se realizó en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, un Simposio sobre presunta Agricultura Sustentable, suelos, Biotecnología y Agrocombustibles, simposio en que la presencia argentina y especialmente de altos directivos del INTA, conformaron el corazón de un encuentro que apuntó a fortalecer las estrategias de neocolonización corporativa en América del Sur. http://www.elmundo.com.bo/Secundarianew.asp?edicion=24/01/2010&Tipo=Economia&Cod=9853

Una vez más, debemos repetir algo que hemos venido afirmando en forma reiterada a lo largo de tantos cientos de Editoriales de Horizonte Sur: el corazón de este modelo neocolonial es el Agronegocio y la Biotecnología. Quienes lo expresan, quienes lo generaron y lo alientan, son quienes continúan fijando las pautas de la dependencia y la relación con las corporaciones, y ello mucho más allá de las disputas menores y ocasionales que puedan, como en el caso de Reutemann, de Binner o de Clarín, tener con el Gobierno. El corazón del proyecto neocolonial está por lo demás, fuertemente implantado en el Ministerio de Ciencia y Tecnología, en el INTA, en el SENASA y en el Ministerio de Agricultura. El resto del Estado administrador y del circo partidario, es la comparsa cómplice que aprovecha o que administra, los que hacen el trabajo sucio de contener la pobreza y el desempleo, los que deben organizar e implementar la represión para las situaciones extremas, y los intelectuales que deben ocultar con discursos y falsos decorados, las dos situaciones más extremas que a decir de mi amigo, el Dr. Antonio Mitre en una comunicación privada desde Córdoba, nos configuran y definen: …”una Argentina colonizada, decadente y sometida, que arrastra dos asuntos pendientes, asuntos que no tienen prensa, que se ocultan, que muchos prefieren ignorar y que son en gran parte causa de los problemas enumerados, la “deuda externa perpetua”, que esteriliza los mejores esfuerzos de nuestro pueblo, que nos hace “vivir pagando para morir debiendo” y el “cerco” geopolítico que los ingleses nos tienden por el sur ( que no es inocuo solo porque nosotros miremos para otro lado) . Ambos actúan como un cepo o mejor como una pinza que nos tiene agarrados de las “pelotas”, una pinza que acota severamente nuestra capacidad de decisión soberana y la autonomía del estado nacional (o lo que de él queda)”.

Decir las cosas que hemos dicho desde Horizonte Sur en la Radio pública a lo largo de más de cinco años no ha sido fácil ni tampoco ha sido regalado ni gracioso, hemos dicho sistemáticamente aquello que no debía decirse en el orden colonial naturalizado, hemos develado lo que no querían ver o no deseaban que otros vieran. Nuestra lucha era por el esclarecimiento de la conciencia de quienes nos escuchaban y en eso hemos ganado, no importa lo que ahora hagan de Horizonte Sur. Ellos nos han combatido cuanto pudieron y trataron de apagar nuestras voces de manera reiterada sin lograrlo, gracias al apoyo incondicional de los oyentes. Ahora que han entregado el poder de los medios a una banda de la izquierda cipaya, han hallado instrumentos más eficaces en el manejo discrecional de las decisiones y en las prácticas del poder desnudo. Sí, nos han dado de baja de la Radio Pública, y también por eso será inolvidable este verano del 2010. Pero son muchos los que, en estos años, han abierto los ojos a la verdad de la situación colonial y confiamos en que continúen el camino que aprendimos juntos. Vivimos en una Argentina colonial y aspiramos a recuperar una Patria para todos, una patria con Proyecto Nacional, con un modelo productivo amigable con la naturaleza y respetuoso de los ecosistemas, una patria con Soberanía Alimentaria y Justicia Social que considere como prioritario lograr la felicidad del pueblo argentino. Aunque ahora seamos censurados y se nos quiten los micrófonos de Radio Nacional, aunque se implante en los medios del Estado el pensamiento único, la fuerza de la verdad triunfará, triunfará más tarde o más temprano. Aunque lo intenten con la peor mala fe, ellos no pueden rescribir nuestra historia. En el año 1972 Perón, en su Mensaje a los Pueblos del mundo, ya anticipó esta época que ahora vivimos y las tareas que debíamos llevar adelante:

”Es urgente una revolución mental en los hombres, especialmente en los dirigentes de los países mas altamente industrializados; una modificación de las estructuras sociales y productivas en todo el mundo, en particular en los países de alta tecnología donde rige la economía de mercado, y el surgimiento de una convivencia biológica dentro de la humanidad y entre la humanidad y el resto de la naturaleza…Esa revolución mental implica comprender que el hombre no puede reemplazar a la naturaleza en el mantenimiento de un adecuado ciclo biológico general; que la tecnología es un arma de doble filo, que el llamado progreso debe tener un límite y que incluso habrá que renunciar a algunas “comodidades” que nos ha brindado la civilización; que la naturaleza debe ser restaurada en todo lo posible; que los recursos naturales resultan aceptables y por lo tanto deben ser cuidados y racionalmente utilizados por el hombre”… Lo dijo Perón hace 38 años, y su pensamiento mantiene total vigencia. Eso es lo que hoy nos proponemos, esas sabias palabras dan lugar a la lucha que llevamos y que no abandonaremos…
Publicado por Conducción y Producción: Jorge Eduardo Rulli, Bernardo Elffman, Wanda Galeotti y el Grupo de Reflexión en 00:48 0 comentarios
Etiquetas: Alejandro Olmos, Carta Abierta, Deuda Externa, Redrado, sojización
domingo 7 de febrero de 2010
NOS CONVOCAMOS A GUAPACHOZA EL JUEVES 11 A PARTIR DE LAS 17 HORAS
"Seguramente, tienen un curioso concepto de lo que es la libertad de prensa que para nosotros es escuchar todas las voces, poder expresarse libremente, que ninguno sea censurado"... Esto fue lo que dijo la Presidente, cuando creyó haber sido censurada por Clarín... Mientras tanto, el Programa Horizonte Sur en la Radio del Estado había sido ferozmente censurado, tan sólo porque la conducción política de la Radio, tanto María Seoane como Vicente Muleiro, están dispuestos a implantar el pensamiento único en la Radio Pública, porque pretenden instalar en ella un discurso monotemático y oficialista, porque odian lo que no comprenden y porque aborrecen todo aquello que convoca a comprender el drama ecológico de la existencia humana. Lamentablemente, son irremediablemente autoritarios, leninistas y estalinistas, chupamedias, progresistas a ultranza y modernizantes tardíos. Sabemos que no tienen remedio alguno, lo que nosotros aspiramos es a tener una respuesta política por parte del Gobierno y de las Instituciones de la República, frente a nuestros derechos menoscabado por el ejercicio de prácticas de Poder desnudo en ámbitos del Estado, y saber por qué razón los criterios sobre libertad de prensa que se le reclaman a Clarín desde la Presidencia, se desconocen en la Radio del Estado, devenida gradualmente en una radio oficialista y propia de una tribuna partidaria.

Para enfrentar la injusticia y para mantener la lucha que llevamos en la nueva y difícil época que enfrentamos en esta año 2010, nos estamos convocando el Jueves próximo once de febrero al Centro Cultural Guapachoza en Jean Jaurés 715 a las 17 horas. Los esperamos.
Publicado por Conducción y Producción: Jorge Eduardo Rulli, Bernardo Elffman, Wanda Galeotti y el Grupo de Reflexión en 03:30 1 comentarios
miércoles 3 de febrero de 2010
SE NOS DA DE BAJA EN RADIO NACIONAL PORQUE SOMOS IRRECUPERABLES...
AYER POR LA TARDE MARTES 2 DE FEBRERO, RECIBIMOS UNA LLAMADA TELEFONICA DE QUIEN SE IDENTIFICO COMO VICENTE MULEIRO, VICEDIRECTOR DE RADIO NACIONAL, PARA DECIRNOS QUE HABIA ESCUCHADO EL PROGRAMA DEL 31 DE ENERO CUIDADOSAMENTE, QUE NOS QUERIA DECIR QUE MUCHA GENTE LES HABIA ACONSEJADO BAJARNOS DIRECTAMENTE, QUE ELLOS HABIAN HECHO UNA EXCEPCION GENEROSA AL CAMBIARNOS EL HORARIO DE LAS ONCE A LAS SIETE DE LA MAÑANA, PERO QUE NOSOTROS CONTINUABAMOS CON LA MISMA ACTITUD CRITICA PARA LA CONDUCCION DE RADIO NACIONAL, QUE NO ERAMOS CAPACES DE RECONOCER LA OPORTUNIDAD QUE NOS DABAN, QUE EN DEFINITIVA, ME LLAMABA PARA DECIRNOS QUE EL ULTIMO PROGRAMA HABIA SIDO EL ULTIMO PROGRAMA.
Publicado por Conducción y Producción: Jorge Eduardo Rulli, Bernardo Elffman, Wanda Galeotti y el Grupo de Reflexión en 02:36 12 comentarios
lunes 1 de febrero de 2010
EDITORIAL DEL DOMINGO 31 DE ENERO DE 2010
En los años cincuenta y en una época que no se parece a la de hoy, el genial Discepolín, inmortalizó desde su programa de radio a un personaje emblemático que llamó “Mordisquito” y que refería y caricaturizaba a un opositor clásico del Gobierno popular. “Mordisquito” mostró a un personaje lamentablemente bastante común en aquella época y en los sectores medios, alguien descreído de toda propuesta que fuera más allá de su limitado entendimiento, disconforme con todo aquello que no significara una ventaja para su persona o para los suyos, escéptico de la política y de los sueños colectivos, encerrado siempre en una lógica egoísta que, en el colmo de la sinrazón, lo conducía a que, en medio de la recuperada felicidad del Pueblo, se preocupara por cuestiones banales, a veces tan irrisorias como aquella en que Discepolín se ensañara con su terrible y ácido humor: “tenés de todo, pero resulta que te falta Té de Ceilán, siempre tomaste mate cocido, pero ahora que el Pueblo está feliz y contento con su Gobierno, a vos te falta el Té de Ceilán…”

Muchos de los hijos del emblemático “contrera” al que Discepolín, desde su programa radial, pusiera el nombre de “Mordisquito”, ese personaje que embanderara su auto y sus balcones en septiembre del 55 festejando la caída del que denominara “el tirano prófugo”, muchos de sus hijos, en los años sesenta se deslumbraron con la Revolución Cubana. Muchos de ellos, asimismo, por la vía del castrismo y demostrando una vez más que la línea recta no es el modo humano más usual de unir dos puntos, al menos en la historia, en los años setenta hicieron una opción por la lucha armada, porque estaban convencidos que era el modo de reproducir aquella revolución en la Argentina. La herencia de odio e incomprensión social, que habían vivido en sus casas de pequeños, les impedía abrazar la causa del movimiento popular desde los sentimientos y sólo pudieron hacerlo, en todo caso, desde el razonamiento y protegiéndose en sucesivos cuestionamientos y en una corporación de iguales, tal como fueran las organizaciones revolucionarias de la época.

Esas organizaciones, consciente e inconscientemente y en la búsqueda de una confrontación definitiva con el enemigo a la vez que socavando al gobierno electo, favorecieron el golpe militar de marzo del 76. Pese a ello y sin ninguna autocrítica de por medio, muchos de ellos, hoy se encuentran en importantes puestos de gobierno y no solamente deciden sobre nuestra suerte, sino que además, pretenden paradójicamente, ser los herederos de aquellas políticas, a las que cientos de miles de “mordisquitos” se opusieron en su momento, y a las que ellos mismos sabotearon más tarde, cuestionando de una manera tal vez mucho más sofisticada y con violencia, que no hubiese suficiente Té de Ceilán… Ahora en cambio, sobra Té de Ceilán, así como autos cero kilómetros, pero para el pueblo raso hay solamente subsidios, planes, bolsas de alimento y encuadramiento forzado en los partidos clientelares y en las organizaciones sociales para poder sobrevivir… pero lo que no hay, es participación ni reconocimiento de la propia dignidad. En esta dictadura de iguales en que los progresistas y neoliberales se enfrentan entre sí con sus propios códigos y lenguajes como en un torneo de izquierdas y derechas emparentadas, el pueblo es sólo una masa que se alquila para las escenografías y torneos de los sectores medios. Existen los derechos, como concesiones graciosas que se conceden desde el Poder, lo que no existe es el poder de poder participar y de ser parte en las decisiones y especialmente de poder decidir qué tipo de país se construye entre todos…

Esos sectores medios pelean sus pedazos de la torta de las retenciones y de las inversiones sociales, juegan de intermediarios de la Deuda Externa, son administradores privilegiados de la cosa pública, luchan entre sí denodadamente por hacerse del poder de ser gestores y e intermediarios con las Corporaciones, pero ninguno de ellos pone en cuestionamiento la calidad neocolonial de una Argentina ecológicamente aplastada bajo más de veinte millones de hectáreas de monocultivos, una Argentina condenada a un modelo de agro exportación y a un rol de país productor de aceites y de piensos, de agro combustibles para los automotores europeos y asimismo, al infame papel de ejercer con su propia población, como laboratorio de prueba de organismos genéticamente modificados.

Alguna vez, en 1895, al preguntársele a Paul Valery, qué perduraba de Leonardo Da Vinci, dijo: “Lo que perdura de un hombre son los sueños que su nombre inspira y las obras que hacen de ese nombre un signo de admiración, de odio o de indiferencia. Si ese hombre sobresale en todos los géneros, el esfuerzo es tanto más grande para captarlo en toda su unidad”. Si acaso extendemos el razonamiento del poeta al caso argentino, comprenderemos algunas de las razones por las que Perón sigue siendo una piedra en el zapato de todos aquellos que pretenden construir con el Pueblo argentino una historia diferente, diferente a los legados y a las prácticas plebeyas, insurgentes y contestatarias que siempre caracterizaron a nuestro Pueblo. Ellos tratan de construir una historia propia y acorde a sus intereses mezquinos de sectores medios, sectores que, como aquel “Mordisquito” de los años cincuenta, continúan anteponiendo lo individual a lo colectivo, a la vez que, creyendo en el progreso y rindiéndole culto al Crecimiento y a las tecnologías. La obstinada tarea de zapa de ciertos filósofos y escritores que nos abruman con su presencia y sus discursos en los medios oficiales u oficialistas, las caricaturas sarcásticas e irreverentes que apuntan al corazón de la memoria y de los sentimientos, los elaborados discursos de los intelectuales corporativos que buscan naturalizar la dependencia neocolonial y distraer sobre las opciones superficiales y aleatorias a las que penosamente confunden con las opciones de Patria o de Colonia…

En esos escenarios de confusiones alimentadas para que el común no pueda tomar jamás la iniciativa, en esos paisajes desolados de la política sometida al chantaje constante del pensamiento, en que el ejercicio de la crítica o del disenso se equipara con la traición, hemos tenido que actuar y predicar a lo largo de los últimos años. No hemos dejado de hacerlo nunca a pesar de innumerables obstáculos ni hemos dejado de usar el arma más importante con que contamos, que es la palabra. Nuestros documentos y los Editoriales son prueba cabal de una constancia y de una línea de conducta que puede no ser aceptada por diversos motivos, pero que merece respeto. Hemos practicado el ejercicio del análisis político, e inevitablemente también, y en forma reiterada, el de la anticipación de las crisis y de los acontecimientos, no porque fuésemos adivinos sino simplemente porque usamos el sentido común, y porque nos obligamos a estudiar y comprender los nuevos problemas que conlleva la Globalización. Se trataba tan sólo de tener un ojo detrás del propio ojo y un oído detrás del propio oído. No fue difícil acostumbrarse a cultivar otras miradas, vinculando lo que habitualmente no se vinculaba, y acostumbrándose a pensar desde los viejos oficios del vivir cotidiano. En todo caso estábamos recogiendo la herencia de Rodolfo Kusch y de Ignacio Lewkowicz al tratar de arraigar el pensamiento. Lo más difícil en todo caso fue siempre la soledad y la incomprensión… Alguna vez en estos trajines, recuerdo que nos dieron de baja un Seminario sobre Ecología política en la UBA, porque arguyeron en el Consejo académico de la Facultad, que constituía casi un escándalo, que un experto en batatas pretendiera hacer filosofía… Supongo que las mismas personas que piensan de esa manera podrían perfectamente pagar los altos costos de un curso de Feinman sobre el peronismo…un peronismo con el que el filósofo convivió de manera instrumental y al que desde el grupo corporativo al que perteneció, trató de darle desde adentro una conducción a pesar de no haber sido nunca peronista ni haberlo comprendido. Esas mismas personas supongo que no se escandalizarían asimismo, de que en medio de la crisis del campo y con medio país bloqueado por piquetes, el director de la Biblioteca Nacional consultara al presidente acerca de su opinión sobre John William Cooke… Esta democracia de baja intensidad es sin lugar a dudas una dictadura de iguales…

Desde hace más de cinco años, en que, durante el Estado de gracia, Mona Moncalvillo tuvo el gesto de ofrecernos un espacio en la Radio Nacional, nos hemos esforzado por hacer de Horizonte Sur un lugar donde poner en práctica esa otra mirada, en tanto que les hicimos un lugar o muchos que no tenían dónde expresar aquellas reivindicaciones que por ser socio ambientales difícilmente tenían espacios en los medios. Fuimos de esa manera comunicadores, pero no fuimos nunca la voz de los sin voz, considerando que cada quien debe aprender a usar ese instrumento fundamental que es la palabra y que nosotros ejercíamos, siempre con altura y convocando a compartir los razonamientos y en especial los sentimientos que los suscitaban. Tuvimos mucha audiencia, pero también nos ganamos enemigos. No podía ser de otra manera, la tarea que nos habíamos dado no era menor. No nos proponíamos tal como intentáramos en otras vidas, cortar los nudos que atan la política argentina, que esa ha sido y sigue siendo tarea de muchos que a la larga o a la corta terminan atándonos con nuevos y más terribles lazos. Nosotros en cambio, nos propusimos desatar esos nudos, desenmarañarlos, encontrar el modo de que supiéramos juntos desenredar esas madejas inextricables de la vida política argentina. Estábamos convencidos que los nudos contienen secretos que conviene descubrir, al menos para no volver a ser atados o enredarse en ellos.

Proponernos y llevar adelante esa tarea, no fue sencillo, y además de un aprendizaje, constituyó para nosotros el ejercicio de revivir la militancia política como puro acto de servicio. Porque debemos aclarar que nunca se nos pagó en la radio pública por hacer este programa. Muchas veces callamos con pudor cuando algunos mordisquitos indignados por nuestra heterodoxia política, nos reprocharon con dureza, que sus dineros se gastaran en sueldos para gentes como nosotros... Ahora queremos tranquilizarlos, jamás en más de cinco años cobramos el más mínimo estipendio de la Radio Nacional. Qué ello no es lo normal en el sistema de medios? Que fuimos claro objeto de discriminación debido a las posiciones que sosteníamos? Que cada uno saque sus propias conclusiones. Nosotros fuimos leales siempre a los oyentes y a nosotros mismos. En un par de ocasiones memorables nos anunciaron que nos bajaban el programa y esas decisiones no pudieron materializarse, debido a la reacción extendida y masiva de los oyentes que, con sus llamados y protestas hicieron colapsar las comunicaciones de Radio Nacional. Asimismo, contamos en ambas oportunidades, con la destacada solidaridad de muchos que no aún no acordando con nuestros pensamientos, desde posiciones importantes de la vida pública, se manifestaron abiertamente contra los intentos de censura.

Y continuamos desde entonces, en Radio Nacional, en una Argentina donde uno se enferma de vergüenza ajena y donde el oportunismo y el chupamedismo bien rentado se han convertido en norma generalizada. Ahora, estamos lamentablemente de nuevo y como Horizonte Sur, enfrentando situaciones límites. En realidad este es en cierto sentido nuestro último programa con ustedes que nos están escuchando. El programa a partir de febrero y por decisión de la conducción de Radio Nacional que constituyen María Seoane y Vicente Muleiro, cambiará de horario. A partir del próximo domingo saldremos al aire de siete a ocho de la mañana, antes de la misa dominical. Somos conscientes que, en buena medida, seremos como el pez al que le quitaron el agua, no nos han dado de baja, pero al sacarnos de la franja horaria aceptable para el común de audiencia que hemos generado a través de estos últimos años, nos habrán dejado sin oyentes. O al menos eso es lo que probablemente piensan y será nuestra tarea demostrarles que una vez más se equivocaron y que podremos responder a los nuevos desafíos. Sin lugar a dudas será una etapa nueva y difícil. Deberemos aprender a generar nuevos y diversos diálogos, habremos de trabajar seguramente, más con la página Web del programa y con las grabaciones, nos esforzaremos por salir al aire en las tantas FM amigas con las que contamos… pero por sobre todo, no desfalleceremos, ni dejaremos de cumplir el deber que nos hemos impuesto hace ya muchos años. Gracias a todos por habernos acompañado hasta este momento de finales de enero del 2010, sabemos que ahora estarán pensando qué hacer, cómo continuar esta relación por encima de la iniquidad y del disfavor. También nosotros lo estamos pensando y estamos seguros que juntos habremos de encontrar el camino, además de encontrarnos en el camino. Un fuerte abrazo.

lunes, 15 de febrero de 2010

Encuentro en Icho Cruz 2010





















Bajo el lema "CONTINUAR CAMPEANDO LA CONSTRUCCIÓN DE PROYECTO SUR", el Movimiento Recuperar lo Nuestro se reunió durante los días 12, 13 y 14 de febrero en la localidad de Icho Cruz (Cba).
Fueron intensas jornadas de debate acerca de la Participación política, el Bicentenario de los pueblos y la Construcción del poder popular.
El paisaje serrano y la calidez de la familia Candido, otra vez pusieron un marco a la tarea de pensar una Argentina diferente para todos y todas.

Se decidieron fuertes líneas de acción que comprometen al MRLN en constantes manifestaciones públicas siguiendo los lineamientos claramente establecidos por Pino Solanas ..."Hay una revolución iniciada hace 200 años que continúa inconclusa, pero en estos tiempos ha vuelto a despertar la conciencia de los pueblos originarios y las mayorías populares que hicieron la independencia. Desde México, el Caribe y Venezuela, pasando por los pueblos andinos, Ecuador, Bolivia, los movimientos campesinos sin tierra de Brasil y Paraguay, lasta la Argentina y Chile, surgen movilizaciones, debates y asambleas constituyentes en un reclamo generalizado de justicia, participación y horizontalidad." CAUSA SUR.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Mitos en torno a la pobreza

DEPENDE: POBREZA
Foreign Policy Edición española
Bernardo Kliksberg

Es el mayor dilema moral del planeta y el más grave delito contra los derechos humanos del siglo XXI. La globalización no acabó con ella y la crisis económica no ha hecho más que agudizarla.

El crecimiento económico reduce la miseria

Ojalá. La realidad ha demostrado ser mucho más compleja. El crecimiento económico es condición imprescindible, pero no suficiente. Hay muchos obstáculos en el camino a la hora de transformarlo en mejoras importantes en la existencia humana. El crecimiento viaja de forma macro y la vida de la gente transcurre en lo micro.

En primer lugar, hay distintos tipos de crecimiento. Puede ser polarizado, focalizado en algunos sectores económicos, circunscrito geográficamente, producir “islas de crecimiento” o no llegar a la gran mayoría. A ello se suma que, si la sociedad es muy desigual, se reduce la posibilidad de que penetre en los estratos más bajos. Eso es lo que ocurre en el mundo actual, cuyos grados de desigualdad han sido calificados de “groseros” en los informes de Desarrollo Humano del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y tildados de “disparidades hirientes” en la última encíclica de la Iglesia católica.

El 20% más rico de la población mundial tiene más del 80% del producto bruto, el comercio, las exportaciones, las inversiones, y más del 90% del crédito. El 20% más pobre, menos del 1%. La desigualdad en la distribución de los ingresos pasó de 30 a 1 en 1960 a 74 a 1 en 1997, y ha seguido aumentando. La del capital acumulado que midió la Universidad de la ONU en 2006 es aún mayor. El 10% más rico tiene el 85% del capital mundial, el 50% inferior sólo el 1%.

Las grandes desigualdades bloquean el desarrollo económico, pero además impiden que se propague entre los más desfavorecidos. Hay sociedades con el mismo grado de riqueza, pero en unas a la gente le va mucho mejor que en otras, porque hay mayor igualdad entre las clases.

La cuestión central es cómo alcanzar un crecimiento inclusivo, en el que quepan todos. Porque ése es, además, el único camino para obtener un desarrollo sostenible. La movilidad social no es una consecuencia del crecimiento, sino el motor fundamental del mismo. Las economías más exitosas de años recientes como las nórdicas, y algunas del sureste asiático, han apostado muy fuerte por sus ciudadanos. Han invertido en educación y en salud. Encabezan las mediciones de rendimiento educativo del informe PISA y las tablas de esperanza de vida.

Los pobres son responsables de su situación

Un mito. Yo lo llamo “la gran coartada”. Para justificar la pobreza, nada mejor que echarle la culpa a las víctimas. El argumento es que los pobres carecen de ambiciones, no se esfuerzan, no estudian, actúan de forma irracional. La pobreza sería un tema de responsabilidad individual. Sería entonces una decisión personal integrarse en el bando de los exitosos o quedarse estancando. La tesis viene acompañada de una formulación semántica: hay “perdedores” y “ganadores”. Los últimos presentan cualidades opuestas. Si la responsabilidad es individual, deja de ser colectiva.

La realidad derrumba a diario ese mito. Hay 1.400 millones de personas en el mundo que viven en la pobreza extrema (menos de 1,25 dólar diario). Casi la mitad del género humano (3.000 millones) son pobres (menos de dos dólares diarios). Resulta inconcebible no ver que no son malas decisiones individuales, sino graves insuficiencias estructurales las que llevan a esos resultados.

En un mundo con una ola de revoluciones tecnológicas que han multiplicado la capacidad de producción de bienes y servicios, 1.200 millones de personas no tienen agua potable y 2.000 millones carecen de electricidad. ¿Acaso es su responsabilidad personal?

La FAO informó de que en 2008 se produjo la segunda mayor cosecha de la historia. Ese mismo año y según Acción Internacional, cinco millones de niños murieron de hambre. Está demostrado que el planeta puede producir alimentos para una población mayor que la actual. Sin embargo, 1.020 millones sufren hambruna (1 de cada 6,5) y el año pasado se incorporaron cien millones más.

Los pobres no son los responsables de vidas con hambre, sin agua y sin electricidad. Hay desigualdades abismales y deficiencias fundamentales de organización social. El problema del hambre no es sólo una cuestión de producción de alimentos (cuanto mayor, mejor), también de acceso a los mismos y de equidad. En realidad, no hay ganadores y perdedores. Con estos grados de exclusión somos todos perdedores. Se debilita la cohesión social y se crean situaciones conflictivas, que generan violencia, y sociedades enfermas.

La ayuda humanitaria no soluciona nada

Otro mito. Se opone “asistencialismo” a “ayudar” y a “dar trabajo”. Se descalifican y se debilitan las políticas sociales. En realidad, se trata de un falso dilema. La extensión y la profundidad de la pobreza requiere respuestas inmediatas.

La miseria mata a diario a mujeres y a niños. Unas 500.000 madres mueren durante el embarazo o el parto, el 99% de ellas en países en desarrollo. La cifra es escalofriante: una por minuto. A pesar de los avances médicos, la tasa de mortalidad materna no ha mejorado desde 1990. Entre las causas, las hemorragias y las anemias, dos problemas que pueden evitarse consumiendo a diario cápsulas de hierro que apenas cuestan unos centavos que las madres pobres no tienen. Las cesáreas, que son necesarias en uno de cada 10 partos y que cuestan menos de 100 euros, tampoco están a su alcance.

Más de nueve millones de niños mueren al año antes de cumplir los cinco. Entre un 33% y un 50% por culpa de la desnutrición. La causa de la muerte suele ser la diarrea, pero tras ella se esconden déficits agudos de micronutrientes básicos. Unos 2 millones de niños fallecen por neumonía. Los antibióticos para tratarla cuestan 27 centavos de dólar. Sus familias carecen de ellos. En total, 18 millones de personas mueren al año por causas vinculadas a la pobreza. Son muertes evitables que la crisis está agravando. Jugar al casino financiero no sale gratis. El Banco Mundial estimó que 22 niños más morirían por hora en 2009 (uno cada tres segundos) por motivos prevenibles.

Se necesitan respuestas inmediatas. La mayor característica de la pobreza es que genera con frecuencia daños irreversibles. Según Unicef, si un niño no se alimenta bien en los primeros años tendrá las conexiones interneuronales de su cerebro incompletas y un retraso severo para toda la vida. La pobreza no puede esperar. Es urgente incrementar las inversiones en salud y educación, y montar mayores redes de protección.

No hay contradicción en proteger a los vulnerables y hacerlo a través de programas que, al mismo tiempo, favorezcan la articulación y la organización de la comunidad, inviertan en el desarrollo de sus líderes y potencien su capital social. Los programas más efectivos de reducción de mortalidad materna en poblaciones indígenas han sido los que se han apoyaron en el fortalecimiento de la misma comunidad y la conminaron a cogestionar el proyecto.

La pobreza no es sólo cuestión de dinero

Es mucho más. Cuando a los pobres se les pregunta en las encuestas qué es lo que más les duele de su situación, la respuesta suele sorprender a los investigadores. Se quejan de las carencias, de la falta de ingresos y de que sus hijos no pueden terminar la escuela primaria, pero lo que en verdad les genera más dolor es “la mirada de desprecio”. Sienten que amplios sectores de la población les observan como a una especie inferior, seres de baja categoría, subhombres y submujeres o que, en el mejor de los casos, les tratan con compasión.

La devaluación del pobre como persona prepara el terreno para su discriminación y, en última instancia, para su demonización. Es un sospechoso en potencia. Uno de los grupos más discriminados es el de los jóvenes en situación precaria. Un estudio de la prestigiosa ONG Periodismo Social, en el que se analizan 120.000 noticias sobre niños y adolescentes en 22 diarios argentinos, extrae conclusiones que pueden aplicarse a otras latitudes: “Pocas fuentes, pocas estadísticas, muchos términos peyorativos… las palabras para referirse a los chicos y chicas que supuestamente cometen delitos son estigmatizantes y discriminatorias… son títulos que condenan antes que lo haga la justicia”.

Los pobres son seres humanos iguales a todos. Perciben la mirada degradante. Por algo, cuando se les interroga sobre las organizaciones que más valoran, sitúan en primer lugar a las que crean ellos mismos como las organizaciones indígenas, de campesinos pobres o de habitantes de zonas marginales urbanas. En esas agrupaciones el trato es horizontal y ellos son los actores, recuperan su imagen humana. Es lo que sucedió por ejemplo con Villa El Salvador en Perú, municipio autogestionado de pobres que obtuvo por sus logros algunos de los mayores reconocimientos internacionales, entre ellos el Príncipe de Asturias.

La pobreza es un complejo de ataques a la dignidad humana. Los economistas convencionales se equivocan por completo cuando abordan temas como el paro o el desempleo como una mera pérdida o merma de ingresos. La falta de trabajo vulnera las aspiraciones más básicas del ser humano. Un reciente estudio de la Universidad de Rutgers, en Estados Unidos, centrado en ciudadanos desempleados, mostró que el 68% estaban deprimidos, el 61% se sentían inútiles y el 55% estaban muy enojados. En el 58% de ellos, el paro estaba afectando a sus relaciones familiares y un 52% evitaban encontrarse con amigos o conocidos. La causa principal: sentían vergüenza por su situación.

América Latina nunca saldrá de la miseria

Es un caso paradigmático. Como experto en el tema y a pesar de que la primera palabra que viene a la mente cuando uno piensa en pobreza es África, puedo argumentar esta afirmación: el continente latinoamericano tiene un tercio de las aguas limpias del planeta, algunas de las mayores reservas de materias primas estratégicas en su subsuelo, fuentes de energía barata, excepcionales posibilidades de producción agropecuaria y una inserción agroeconómica privilegiada.
Sin embargo, más de un tercio de su población está por debajo de la línea de la pobreza (189 millones), mueren 30 niños de cada 1.000 antes de los 5 años frente a 3 en Suecia o en Noruega, perecen 90 madres por cada 100.000 nacimientos frente a 6 en Canadá. La pregunta es: ¿por qué tanta pobreza en un lugar potencialmente tan rico?

La razón principal es que es la más desigual de todas las regiones. El 10% más rico tiene más de 40 veces lo que el 10% más pobre, frente a 10 en España, y 6 en Noruega. Hay fuertes desigualdades en ingresos, acceso a la tierra, a la salud, a la educación y al crédito, y ahora, a las nuevas tecnologías. La región produce alimentos para tres veces su población. Sin embargo, el 16% de los niños padecen desnutrición crónica. En el 20% más pobre sólo uno de cada 3 jóvenes termina la secundaria y sólo uno de cada 100 accede a la Universidad.

La desigualdad genera “las trampas de pobreza”. Si un joven nace en una villa miseria, un caserío indígena, una zona rural pobre, tendrá problemas nutricionales, trabajará desde pequeño (el 11% de los niños menores de 14 años lo hacen), no podrá finalizar la escuela primaria o la secundaria, y, sin ella, no conseguirá trabajo en la economía formal. Un 25% de los jóvenes están fuera del mercado de trabajo y del sistema educativo.

De las “trampas de pobreza” se sale con políticas públicas activas que intenten universalizar los derechos reales a la alimentación, a la salud y a la educación, que democraticen el crédito, fortalezcan las posibilidades de generar microemprendimientos y pymes y que abran oportunidades para todos. En los últimos años, la participación creciente de la sociedad civil, y su presión para que se adoptaran políticas incluyentes, generaron cambios importantes que muestran que sí es posible combatir la pobreza y que lograrlo pasa por mejorar la equidad.

Entre ellas, el gigantesco programa social Bolsa Familia, montado por Lula da Silva en Brasil y que cubrió las necesidades básicas de 45 millones de pobres entre los pobres; los programas del Gobierno uruguayo que reformaron la salud y permitieron que todos los niños de las escuelas públicas tengan un ordenador; los programas de protección a toda la población adulta en Chile y Argentina; el subsidio universal a los niños pobres en este último país; la reducción a tasas mínimas de la mortalidad materna y la infantil aumentando la inversión en salud en medio de la crisis en Costa Rica, y otras similares en otros países.

La acción de políticas públicas enfocadas hacia las prioridades reales de la población, y el apoyo a las mismas por parte de empresas socialmente responsables y una sociedad civil movilizada por la solidaridad, pueden mejorar la difícil vida de gran parte de la población de América Latina. Pero todavía queda un largo camino por recorrer.

Siempre ha habido y habrá pobres

Coartadas. Muchas élites adjudican a la pobreza una suerte de maldición ancestral. Por ejemplo, cuando los periodistas acosaban al ex presidente argentino Carlos Menem por el aumento de la pobreza en la Argentina de los 90, consecuencia directa del modelo ortodoxo liberal que él aplicó, solía argumentar: “Pobres hubo siempre”.

Las cifras difieren y son tozudas. En ese país, la pobreza era inferior al 10% a principios de los 60 y después de Menem alcanzó el 58% a finales de 2002. En Noruega, líder mundial en Desarrollo Humano, hay cero pobreza. En España, los indicadores actuales no tienen nada que ver con los de la época de Franco.

Los profetas, creadores de la idea de justicia social, dicen en la Biblia: “No habrá pobres entre vosotros”. Se refieren a que los recursos potenciales están en todas las sociedades, y dependiendo del modelo de organización, la pobreza puede erradicarse.

Con la manida visión de la “maldición ancestral” se borra la relación entre pobreza y desigualdad y se evita hacer los cambios imprescindibles. Asimismo, se aprovecha al máximo la falta de capacidad de lobby de los pobres, los pobres no cuentan. Como señaló el premio Pulizter, Nicholas Kristoff, en The New York Times, refiriéndose a las elevadas tasas de mortalidad femenina en el Tercer Mundo en una era de avances médicos espectaculares, estas cifras no despiertan interés porque “sus víctimas son pobres, rurales, no educadas, y mujeres”.

La lucha contra la pobreza pasa, en primer lugar, por romper la falta de sensibilidad actual. Ante tantas víctimas de las políticas neoliberales de las ultimas décadas, la opinión pública comenzó a percibir a los niños de la calle, a los ancianos mendigos, a las madres que piden con sus bebes, a los sin techo como si fueran parte de la naturaleza de las ciudades, como “si lloviera”.

No se conmueven ante el sufrimiento. Es necesario recuperar la capacidad del ser humano para rebelarse contra las injusticias. Y eso es la pobreza: una injusticia éticamente inadmisible.

Los pobres son culpables del cambio climático

Al contrario. El cambio climático avanza con mucha más rapidez de lo que se creía. El dióxido de carbono retenido en la atmósfera es de 385 partes por millón frente a 339 en 1980. El aumento de las temperaturas está fundiendo los glaciares y produciendo un aumento de 3 milímetros por año en el nivel del mar, el doble que en el siglo XX.

El aumento de las temperaturas y de las lluvias genera un ambiente propicio para la transmisión de enfermedades infecciosas. Aumentan las inundaciones y se expanden enfermedades como el dengue, la malaria, el cólera y la fiebre amarilla. Los más afectados son los más vulnerables: los que viven al borde de zonas inundables, en viviendas precarias; los pequeños agricultores afectados por las sequías; los relegados del planeta a sus sitios más hostiles.

Se estima que el cambio climático está produciendo 300.000 muertes por año. Crecen los refugiados climáticos, que se acercan a los 50 millones. Han debido irse de sus lugares de origen y ni siquiera el Derecho Internacional tiene ninguna figura para amparar a este tipo de exiliados.

Los informes estiman que los habitantes de los países pobres tienen 78 veces más posibilidades de resultar afectados por el cambio climático que los de las naciones ricas. Se trata de una de las mayores desigualdades, la vulnerabilidad totalmente disímil.

Además, está claro que ellos no son los generadores del envenenamiento del ambiente, en el que tienen una participación marginal. Los datos no mienten, pero también en este apartado la élites del planeta culpan a los más desfavorecidos, mostrando la capacidad infinita del género humano para fabricar pretextos y no enfrentarse los desafíos morales que tienen por delante.

Resulta imprescindible superar ésta y todas las otras coartadas, pretextos e insensibilidades frente a la pobreza, la gran violación de los derechos humanos del siglo XXI, para avanzar en la construcción del mundo mejor que reclaman los ciudadanos. Gandhi, como buen visionario, lanzó una advertencia que sigue en plena vigencia: “La diferencia entre lo que hacemos y lo que somos capaces de hacer bastaría para solucionar la mayoría de los problemas del mundo”.




El autor de este artículo, Bernardo Kliksberg, ha escrito en colaboración con el indio Amartya Sen, premio Nóbel de Economía, el libro Primero la gente. Una mirada desde la ética del desarrollo a los principales problemas del mundo globalizado (6ª edición actualizada, Editorial Temas, Buenos Aires, 2009). También destacan sus obras Más ética, más desarrollo, Bernardo Kliksberg (Editorial Temas, Buenos Aires, 2009) y Es difícil ser joven en América Latina. Los desafíos abiertos, del que es compilador, junto a Joseph Stiglitz, Rebeca Grynspan y otros (Editorial Sudamericana, Random House Mondadori, 2010).

Otras obras imprescindibles para analizar las causas y el impacto de la pobreza son: The Life you Can Save: Acting Now to End the World Poverty, Peter Singer (Editorial Random House, Nueva York, 2009); ‘Impact in Latin America: Economies are Better Prepared to Face the Global Crisis, People are Not’, Rebeca Grynspan, Foreign Policy (Latin America Social Forum, 2009), http://www.foreignpolicy.com/files/LASF_2009_Web_1.pdf ;‘Corporate Social Responsibility in Latin America: not a Waste of Time or Money’, Rebeca Grynspan y Bernardo Kliksberg, Foreign Policy (Latin America Social Forum, 2008), http://www.foreignpolicy.com/promotions/lasf2008.pdf.



Fuente: http://www.fp-es.org/depende-pobreza

lunes, 8 de febrero de 2010

Compañeros Militantes en el sur



















Desde el amanecer del día 31/01/10, los compañeros Movimientistas Adriana Sarmiento y Nicolas Alessio, dejaron sus multiples actividades en Córdoba para dirigirse, con ánimo militante, hacia la ciudad de Trelew.


Participaron junto a otros compañeros del Seminario de Formación Teológica,evento que congrega año a año a muchas personas inquietas en cambiar esta sociedad. Compartieron con gente de nuestro país y del exterior, de todos los credos e ideologías en un debate profundo acerca de la militancia que construye espacios de poder popular.
Aprovecharon el momento para contar las inquietudes de MNRL y de lo importante que es Campear la construcción de Proyecto Sur como alternativa para el verdadero cambio en el modo de hacer política.
Marcharon por las calles de la ciudad de Trelew desplegando nuestras banderas.

miércoles, 3 de febrero de 2010

Continuar campeando la construcción de Proyecto Sur





Con la intención de organizar nuestro encuentro anual, nos juntamos en la casa de la compañera Silvia Trevini y su esposo Juan Carlos quienes nos recibieron gentilmente.
En la ocasión se determinó que nos reuniremos en la casa de la Familia Candido (Icho Cruz) para debatir durante los dìas 12, 13 y 14 de febrero acerca de CONTINUAR CAMPEANDO LA CONSTRUCCIÒN DE PROYECTO SUR